San Diego Chargers 2016

Sin motivos para el optimismo

2296

RANKINS 2015 (4-12, 4º AFC WEST)

Ataque Media NFL
Puntos Anotados 20,0 26º
Yardas Totales 371,8
Yardas de Carrera 84,9 31º
Yardas de Pase 286,9
Defensa Media NFL
Puntos encajados 24,9 21º
Yds tot. permitidas 361,9 20º
Yds car. permitidas 125,3 27º
Yds pas. permitidas 236,6 14º

TRANSACCIONES PRINCIPALES

SALIDAS:

Eric Weddle, S (Baltimore)
Donald Brown, RB (New England)
Ladarius Green, TE (Pittsburgh)
Ricardo Matthews, DE (Pittsburgh)
Kendall Reyes, DE (Washington)
Patrick Robinson (Indianapolis)

LLEGADAS:

Casey Hayward, CB (Green Bay)
Brandon Mebane, DT (Seattle)
Travis Benjamin, WR (Cleveland)
Dwight Lowery, S (Indianapolis)

DRAFT CLASS 2016

1 (3) Joey Bosa DE Ohio State
2 (35) Hunter Henry TE Arkansas
3 (66) Max Tuerk C USC
4 (102) Joshua Perry LB Ohio State
5 (175) Jatavis Brown LB Akron
6 (179) Drew Kaser P Texas A&M
6 (198) Derek Watt FB Wisconsin
7 (224) Donavon Clark G Michigan State

Bajan revueltas las aguas por el sur de California. Tras el fracasado intento por llevar la franquicia a Los Ángeles la familia Spanos sigue con su tira y afloja con la ciudad de San Diego para obtener los permisos y financiación para la construcción del anhelado estadio que asegure la permanencia de la franquicia en la zona.

Entre tanta tensión, con la afición dividida y asustada por la posibilidad de quedarse sin equipo, el plano deportivo queda en un segundo plano y tampoco es de extrañar. Otra campaña más de mediocridad saldada con un penoso récord de cuatro victorias por doce derrotas no parece el mejor reclamo para captar la atención de la sufrida afición californiana.

La nueva temporada no parece iniciarse con mejores augurios. Ocupado en cosas más importantes, Alex Spanos parece haber dejado la parcela deportiva al margen, sólo así se explican decisiones tan impopulares como mantener al head coach Mike McCoy en el cargo o el ridículo hecho en la negociación con Joey Bosa, flamante número tres absoluto del pasado draft. Mientras tanto Philip Rivers ve cómo se va dilapidando su fantástica carrera en otra temporada que apesta a mediocridad.

Múltiples y variadas lesiones (especialmente en la línea ofensiva) condicionaron el desempeño ofensivo del equipo en la temporada pasada lo que no ha servido de excusa para salvar la cabeza de su coordinador, Frank Reich. Para sustituirlo McCoy ha optado por traer de vuelta a Ken Whisenhunt después de su fracaso como head coach en Tennesse. Con él a los mandos se espera una reedición de la temporada 2.013 que sirvió para resucitar la carrera de Philip Rivers.

Para ello será necesario que las lesiones no asolen a la línea ofensiva, auténtico quebradero de cabeza durante el año pasado lo que provocó una muy deficiente protección para Rivers y un desempeño aún más catastrófico en el juego de carrera. A pesar de todas las carencias demostradas parece que en la franquicia hay confianza en el nivel de la unidad siempre y cuando la salud acompañe. Sólo así se entiende que repitan en la alineación King Dunlap (LT), Orlando Franklin (LG), D.J. Fluker (RG) y Joe Barksdale (RT) y que sólo se haya reforzado la posición de center por partida doble en la agencia libre con Matt Slauson y en el draft con el tercera ronda Max Tuerk. Esperemos que no se repita tanta mala suerte porque ya se pudo comprobar que Tyreek Burwell o Kenny Wiggins no dan el nivel y tampoco creemos que el jugador de séptima ronda Donavon Clark vaya a ser una opción fiable.

Si la línea acompaña tal vez Melvin Gordon espabile y disipe las dudas que generó con su penosa temporada de debut aunque por lo que se pudo ver cuando Danny Woodhead tomaba el relevo, lo del novato no era tanto una cuestión de falta de huecos como de incapacidad para leerlos. Mala cosa ésa en un runningback. En cualquier caso Ingram se postula como corredor primario mientras Woodhead parece destinado a ejercer el papel de comodín al que le limita su liviana estructura. Por detrás de ambos figura el UDFA Kenneth Farrow y el fullback novato Derek Watt.

En la posición de receptor Keenan Allen llevaba camino de confirmarse como un genuino «go to guy» hasta que se lesionó de gravedad a mitad de temporada. Su baja puso de manifiesto la debilidad de la unidad y se espera que esta temporada pueda volver a cien por cien para deleitarnos con sus rutas milimétricas y su tenacidad después de la recepción. La retirada del veterano Malcom Floyd ha sido paliada con la incorporación del eléctrico Travis Benjamin, todo un cambio de registro para la segunda opción de Rivers. Completan la rotación tres incógnitas como Dontrelle InmanTyrell Williams e Isaiah Burse.

En la posición de tight end vuelve una temporada más el inmenso Antonio Gates aunque con un papel mucho más reducido que le libera de las tareas menos agradecidas para explotar su maravillosa capacidad de desmarque como receptor. Tras la marcha de Ladarius Green el equipo apostó por reclutar en segunda ronda del draft a Hunter Henry quién será el encargado de comerse el marrón en los bloqueos mientras aprende el oficio del futuro hall of famer.

Con estos mimbres Philip Rivers volverá a intentar liderar a su equipo a los playoffs mientras sigue demostrando su maestría dentro del pocket y su liderazgo en todo el campo. Si Rivers cae el insulso Kellen Clemens aparece como segundo de a bordo en el depth chart, pero si eso sucediera estamos seguros de que a nadie le va a importar porque la temporada de los Chargers se habría acabado.

MVP ATAQUE. Philip Rivers. Uno de los mejores en su puesto de la NFL actual.

La unidad coordinada por John Pagano volvió a ser vapuleada por sus rivales y muy especialmente en la trinchera en la que fueron maltratados de mala manera por las líneas y corredores rivales.

Para que eso no se vuelva a repetir se ha incorporado al inmenso Brandon Mebane para anclar el centro de la defensa y darle un poco más de consistencia al front seven. A su lado formarán el prometedor jugador de tercer año, Darius Philon y el veterano Corey Liuget. Detrás de ellos aparece la controvertida del novato Joey Bosa quién, superado su holdout, se postula como posible titular en la línea defensiva. Habrá que ver cómo encaja este jugador en la defensa 34 de Pagano ya que todos los expertos lo señalan como un prototípico end para una 43. Damion Square será el encargado de dar el relevo a Mebane y Tenny Palepoi hará otro tanto en la posición de defensive end.

En la posición de linebacker interior Denzel Perryman se ha hecho con una plaza de titular después de una prometedora campaña de debut. Hay muchas esperanzas puestas en el jugador de segundo año para que se convierta en la clase de jugador que parece claro que nunca será el decepcionante Manti Te’o, su compañero en el centro de la defensa. En el exterior Melvin Ingram será el encargado de crear presión sobre el quarterback rival, tarea en la que es todo un especialista gracias a su explosividad y agilidad. En el lado contrario Jerry Attaochu cumple con su cometido pero sin epatar. Como sustitutos en la posición de linebacker aparecen los novatos Jatavis Brown y Joshua Perry en el interior y Kyle Emanuel y Tourek Williams en el exterior.

La secundaria presenta la baja del eterno capitán Eric Weddle quién terminó su contrato y decidió emigrar a Baltimore ante la indiferencia mostrada por la única franquicia para la que había jugado en toda su carrera. Su baja se hará notar no sólo en el campo, también el vestuario y la propia grada echarán de menos a uno de los jugadores más queridos y respetados. Para llenar tan enormes zapatos los Chargers han incorporado al veterano Dwight Lowery aunque no parece que un jornalero como él sea el más indicado para sustituir con éxito a un jugador como Weddle.

En la posición de strong safety repite Jahleel Addae, una máquina de golpear y también de fallar. No parece que esta combinación vaya a aportar mucha seguridad en el centro de la secundaria. Mejor pintan las cosas en el exterior con la presencia del estelar Jason Verrett que en sólo dos años se ha confirmado como uno de los mejores cornerbacks de la competición. En el lado opuesto Brandon Flowers espera acallar las dudas que despertó la temporada pasada en la que rindió muy por debajo de su nivel por culpa de las lesiones. La posición de nickelback será propiedad de Casey Haward fichado en la pasada agencia libre después de una excelente trayectoria en los Green Bay Packers. Estos son los cinco principales actores de la secundaria de San Diego, Steve Wiiliams, Craig Mager, Adrian Phillips y Darrell Stuckey serán los actores secundarios. Si sus nombres no les suenan de nada no se lo reprochamos.

MVP DEFENSA. Melvin Ingram. 10,5 sacks llevaron su firma la pasada temporada y se espera que siga mejorando su rendimiento.

Después de una larga carrera en el equipo, los Chargers decidieron despedir a Mike Scifres para apostar por un joven punter seleccionado en sexta ronda del draft, Drew Kaser, que así se llama el muchacho, tiene ante sí el reto de hacer olvidar a quién durante trece años ha sido una de las referencias de la franquicia. Más novedades en los retornos con Travis Benjamin encargándose de los punts e Isaiah Burse de los kickoffs. En la posición de kicker se mantiene la continuidad con el jugador de segundo año Josh Lambo.

– Philip Rivers sigue siendo uno de los mejores quarterbacks de la NFL.
– Es imposible que vuelvan a tener tantas lesiones como el año pasado.
– La llegada de Brandon Mebane y Joey Bosa debería revitalizar el anémico front seven.

 

– Siguen las dudas en ambas trincheras.
– El nivel de la división no invita al optimismo.- El divorcio entre la afición y los propietarios es claro y evidente.

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